martes, 3 de diciembre de 2013

Lo grave de tener gatos.

Tener gatos puede provocar daños mentales permanentes, pero nadie se molesta en avisarnos.


86% de los dueños de gatos experimentan o han experimentado algunos de los siguientes síntomas. 


¿Cuántos padeces tú?


1. Tenemos conversaciones enteras con ellos, donde nosotros mismos interpretamos la voz de nuestro gato.




2 . De alguna manera hemos aceptado el hecho de que algo va a estar destruido o en el suelo cada vez que llegamos a casa.



3 . Nos gusta pensar que aman las sesiones de fotos, a pesar de que la evidencia diga lo contrario.




4 . Dejamos que caminen en nuestros teclados, y por eso nuestro historial de búsqueda luce cómo si fuera el de alguna clase de adicto.





5 . El 80 % de las fotos en nuestro celular son de nuestros gatos, pero no las subimos a facebook porque ya piensan todos que estamos locos.



6 . No podemos evitar corregir a los que llaman a nuestra gata por "él", o a nuestro gato por "ella".



7 . Dejamos de hacer todo, por más importante que sea, cuando llegan a pedir que los acariciemos.



8 . Y lo hacemos tanto tiempo como nos dejen.




9 . Lo cual, inevitablemente, nos lleva esto. Acariciárles la pancita un segundo y que nos muerdan al siguiente.



10 . Nos sentimos profundamente heridos cuando realmente queremos su amor y no se dejan.


11 . Dejamos que cacen cada extremidad de nuestro cuerpo. (por más doloroso que esto llegue a ser).



12 . Que tengan todo lo que quieran, incluso nuestra preciada comida.



13 . Cuando no conseguimos que dejen de hacer algo malo, nos resignamos y mejor, lo grabamos.



14 . Permitimos que hagan cosas repugnantes porque sí. (Cosas como... Comer tan rápido que vomiten en su plato y sigan comiendo sin que les importe)



15 . Gastamos el dinero en juguetes caros para ellos, sabiendo que le harán más caso a cualquier objeto o cualquier hilo que esté tirado en el suelo.



16 . El veterinario nos regaña por consentir demasiado a nuestros gatos (con toda la comida que quieren).



17 . Y toleramos la pasiva y agresiva represalia cuando los ponemos a dieta.



18 . Pero después de un tiempo, nos acostumbramos, al igual que ellos. (JAJÁ)



19 . Ya nos acostumbramos a limpiar el arenero, hace tiempo que dejamos de quejarnos.



20.  Ya no nos asustamos cuando escuchamos algún ruido a las 3 de la mañana, sólo nos preguntamos “Ahora ¿Qué tiraron?”.



21 . Pero al menos no necesitamos despertador, porque son muy puntuales para pedirnos su alimento todos los días, a las 6 de la mañana.



 22 . Permitimos que convirtieran eso de ir al baño en una actividad social.



23 . Principalmente porque mantener las puertas cerradas conduce a esto:



24 . Con mucho gusto aceptamos que cualquier prenda que vistamos estará cubierta con pelo de gato.



25 . Es triste cuando nos damos cuenta que nuestro gato no es lo suficientemente interesante como para ser famoso en YouTube.



26 . Al mismo tiempo que adoptamos un nuevo gato nos lamentamos por no poder adoptar a más.



 27 . Nunca nos movemos cuando el gato ya se acostó en nuestras piernas.




28 . Tampoco nos sentamos si hay algún gato acostado en la silla.



29 . Tratamos de explicarle a los amantes de perros por qué amamos a los gatos, aún cuando sabemos que nunca lo entenderán.



30 . Los amamos…


31 . Porque son los animales más dulces…



32 . Más lindos...




33 . Más divertidos...




34 . Y más fotografiables del planeta <3


Post Original (en inglés): distractify.com